Parlamento del MERCOSUR preocupado por el Aedes El mosquito es el transmisor de enfermedades como el dengue, el zika y la chikunguña. Mientras a nivel internacional se procura el trabajo en conjunto entre los países para enfrentar a estos males, en Corrientes no hay una labor sanitaria unificada entre Provincia y Capital.
“El mosquito (Aedes aegypti) no reconoce los límites políticos ni los geográficos”, comentó Wherles Rocha, parlamentario del MERCOSUR por Brasil. A unos pasos, su par de Bolivia, Edgard Romero Flores, esbozó una afirmación similar, a pesar de que mantenían conversaciones por separado: “No respeta las ideologías, pica a cualquiera”.
El pasado lunes se concretó en Montevideo, Uruguay, la XXXVIII sesión del Parlamento del MERCOSUR. En dicho encuentro, los representantes de los diferentes países integrantes del bloque que conforman la comisión de salud del cuerpo expresaron su preocupación por el avance exponencial del dengue, el zika y la chikunguña (o chikungunya): todas enfermedades transmitidas por este mosquito vector (y otro de reciente aparición, el Aedes albopictus).
Durante la reunión de la comisión, previa a la sesión parlamentaria, se analizaron diversos proyectos e iniciativas para combatir el constante crecimiento de estos males en los países integrantes del MERCOSUR (Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay, Venezuela y Bolivia) y el posible incremento de casos severos.
“El dengue es un desafío sanitario cada vez mayor en todo el mundo y, en particular, para toda nuestra región y países del bloque, por la creciente presencia del vector, la tropicalización del clima que favorece su extensión y la cantidad de personas que viajan, circulan y se trasladan desde lugares donde es endémico”, comentó Alejandro Karlen, parlamentario del MERCOSUR, quien representa a la provincia de Corrientes.
Precisamente, Karlen presentó un proyecto de Recomendación que promueve la declaración de zona endémica al territorio comprendido por Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Venezuela y el Noreste (NEA) y el Noroeste (NOA) de Argentina, respecto al dengue. La iniciativa busca a través de su aprobación la asimetría y el equilibrio de las acciones en cada uno de estos países.
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), casi la mitad de la población mundial vive en países donde el dengue es endémico. La entidad también aseveró que más de 390 millones de personas en el mundo lo padecen cada año.
Curiosamente, y mientras hay alertas en los organismos internacionales y los parlamentarios del MERCOSUR expresan su preocupación, en Corrientes el Ministerio de Salud Pública resolvió informar sobre la aparición de nuevos casos “cada 15 días” y desde hace un par de meses sus profesionales no trabajan en forma conjunta con los de la Municipalidad capitalina. Reservar información y evitar labores conjuntas “por cuestiones políticas” contradice la apuesta de los parlamentarios para enfrentar estos males.
En el texto del proyecto, Karlen manifestó que para el logro de los objetivos planteados en la iniciativa parlamentaria “es necesario un intercambio de informaciones y de bancos de datos relativos a las tendencias epidemiológicas, comportamiento y prácticas sociales”, en los países integrantes del MERCOSUR.
“Es nuestra responsabilidad articular con los Ejecutivos (de los diferentes países del MERCOSUR), con los organismos internacionales, con los expertos. Debemos realizar un trabajo intensivo y evitar que estas enfermedades se sigan propagando”, comentó Romero Flores a época. Luego, el parlamentario boliviano fue concluyente: “No queremos gente tirada en las camas de los hospitales, hay que trabajar por la vida y la salud”. “Estamos dejando las diferencias políticas de lado. El mosquito no respeta ideologías. Pica a cualquiera”, insistió el representante del país del altiplano.
Ante los micrófonos de este medio, el brasileño Rocha respaldó a su par boliviano: “No podemos trabajar cada uno por su parte, debemos encontrar las soluciones en conjunto”.
Zika, de ser una enfermedad casi desconocida a un peligro latente La última de las enfermedades del prospecto del mosquito Aedes aegypti es el zika, mal hasta hace un par de años sin trascendencia por estos lares pero que ahora la OMS declaró “una emergencia de salud pública”. Por estos días ya se propagó a una treintena de países de América Latina y el Caribe.
En algunos pacientes, el virus del zika puede provocar parálisis (síndrome de Guillain-Barré) y hay profesionales que vinculan a la enfermedad con la microcefalia en recién nacidos de madres infectadas.
La microcefalia es la degeneración o malformación del cerebro que determina el nacimiento de niños con una cabeza de tamaño más pequeño que el normal y que en ocasiones provoca la muerte. En diciembre de 2015, el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) publicó un aviso sobre la posible asociación del virus del zika con microcefalia congénita. Los datos sugieren que en los fetos de las mujeres infectadas por el virus durante el primer trimestre del embarazo existe un riesgo alto de microcefalia; otras investigaciones indican que, además de ese síndrome, este tipo de transmisión vertical podría causar daño cerebral.
“El número de enfermos de zika ha crecido en Bolivia y Latinoamérica. Los casos reportados en mi país en abril y mayo se han duplicado en relación a años anteriores. Las autoridades están muy preocupadas. En sólo un estado, Santa Cruz, hay unas 50 mujeres embarazadas con el mal. Esto demuestra que tenemos que aplicar medidas urgentes”, comentó Romero Flores a época. Por ahora, no existe una vacuna ni un tratamiento específico para la enfermedad. Por lo tanto, la atención se centra en el alivio de los síntomas, reposo, rehidratación y medicamentos para la fiebre y el dolor.
En una reciente entrevista con época, la presidente de la firma Bayer Pharmaceuticals Latinoamérica, Laura González Molero, dijo que la compañía de capitales alemanes “ha destinado numerosos recursos” para enfrentar al zika. Apuntó que en la labor pretenden un trabajo conjunto con los gobiernos para erradicar la pandemia.
“Tenemos recursos económicos, nuestras instalaciones y un equipo multidisciplinario mundial focalizado en dar respuestas a cómo controlar este virus del zika, esto nos ha llevado a poder desarrollar soluciones muy especificas”, añadió.
Si bien el zika se diseminó por América Latina, en Corrientes sólo se pudo identificar dos casos. Ambos en la ciudad de Mercedes y serían importados.
Éramos pocos y apareció el “mosquito tigre”
Como si la presencia del Aedes aegypti no fuera intimidante, los expertos ahora focalizan sus temores en la aparición de un pariente cercano, el Aedes albopictus, también conocido como “mosquito tigre”.
Se trata de una especie invasora diurna originaria del Sudeste de Asia, que se extendió por África, América y Europa desde 1979 y posteriormente por la zona del Pacífico. Representa una creciente amenaza para la salud pública en todo el mundo debido a su rápida y agresiva expansión desde su área de distribución nativa, ya que desde hace casi 40 años ha conseguido propagarse por todos los continentes del planeta excepto la Antártida.
En América continental, la primera introducción del “mosquito tigre” fue en Estados Unidos en 1985. Un año después fue detectado en Brasil.
En Argentina fue descubierto en 1998 en el Norte de Misiones, los expertos aseguran que por ahora no se diseminó al resto del país aunque hay especialistas que aseguraron que ya pudo observarse en la provincia de Corrientes.
Mientras el Aedes aegypti es un excelente transmisor de dengue y chikunguña, su primo hermano, el Aedes albopictus lo es del zika.
Pero el “mosquito tigre” tiene, además, dos peculiaridades muy preocupantes: puede sobrevivir en climas templados (el frío no lo afecta tanto como a su pariente más conocido) y pasa las infecciones directamente a sus crías sin necesidad de picar previamente a un enfermo.
Este mosquito se caracteriza por su coloración negra con ornamentación blanca en tórax y abdomen, patas a bandas negras y blancas y una conspicua línea blanca longitudinal central en tórax y cabeza. Tiene una longitud de entre unos 5 y 10 mm. (Época)Domingo, 29 de mayo de 2016
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