Argentinos cruzan a cargar nafta en Brasil y Paraguay La modalidad se registra en Misiones, Formosa y Corrientes para beneficiarse con un precio equivalente a 7 pesos el litro, que para algunos automovilistas representa un ahorro de hasta 1.200 pesos mensuales.
El tema del aumento de los combustibles volvió a poner en vigencia el tradicional adagio "hecha la ley, hecha la trampa", y ya hay quienes intentan bajar costos adquiriendo el cada vez más valioso "tesoro" cruzando las fronteras.
Así, ya son muchos los automovilistas de provincias fronterizas como Misiones, Formosa y, en menor Corrientes, que se aventuran a salir del país para abastecerse de combustible en las estaciones de servicio de Paraguay o Brasil, donde el precio por litro es hasta casi 7 pesos más bajo que en esa región de la Argentina.
Este recurso puede implicar para el castigado consumidor de nafta un ahorro promedio mensual de unos 1.200 pesos para un vehículo chico, llenando el tanque (50 litros) una vez por semana.
Estas ventajas benefician a automovilistas y dueños tanto de flotas como de camiones y servicios de combi de ciudades como Clorinda, Formosa, Posadas, Puerto Iguazú (limítrofes con Paraguay) y Santo Tomé, Alvear, Paso de los Libres y Bernardo de Irigoyen (limítrofes con Brasil).
En cambio, para los habitantes de Entre Ríos la ecuación es la inversa, ya que esa provincia recibe al aluvión de uruguayos que diariamente cruza el río para llenar los tanques en los surtidores argentinos que, pese a las subas, siguen siendo 3 pesos más baratos que en la orilla vecina.
Según estimaciones, el litro de nafta super en Paraguay se consigue a $ 13,19 y en Brasil a $ 15,50, contra $ 17,08 que se paga en la Ciudad de Buenos Aires y algunos distritos de la provincia, pero que trepa a $ 19,78 en Misiones, Formosa o Corrientes. Esto ocurre porque en el interior los combustibles cuestan más por cuestiones de logística y menor cantidad de estaciones.
Sólo se exceptúan de esta regla la Patagonia, el departamento mendocino de Malargüe y el bonaerense Carmen de Patagones, que luego 20 años recuperaron un beneficio que reduce en un 22% el litro de nafta y en un 12% el de gasoil, mediante la exención del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles.
Ya es tradicional el comercio de ciudades argentinas fronterizas con Brasil y Paraguay, que se incrementó desde 2003 con la caída de la convertibilidad que trajo aparejado un tipo de cambio competitivo. Pero con el tiempo, la inflación argentina y los sucesivos aumentos en los combustibles, que en lo que va de este año acumulan un 30%, terminaron con las ventas.Miércoles, 4 de mayo de 2016
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