“Me convocan para películas con intensidad dolorosa” “Me he divertido, sufrido, llorado, me han intentado matar, pero he sobrevivido”, dice el actor, feliz de que a los 54 no lo llamen para “papeles de abuelo” sino para seguir dando batalla con personajes fuertes en un medio “cruel”.
Años y años de filmaciones, de pisar escenario y de involucrarse con el mundo de la tele. Juan Palomino (54) hizo camino al andar. El mismo que hoy lo llevó a ser uno de los protagonistas de Kryptonita, la nueva apuesta del cine que está en los cines desde el pasado 3 de diciembre, orientada a toda la familia y se convierte en una de las alternativas más vistas antes de las fiestas. Epoca en la que los balances son casi inevitables, y el actor se anima a hacer público el suyo.
-Tenés mucho recorrido en el mundo del cine, ¿Las propuestas todavía te siguen sorprendiendo?
-No es una industria pan comido para mi. Cumplí cincuenta y cuatro años y lo que me llama poderosamente la atención es que jóvenes cineastas, todavía me convoquen para hacer películas donde está muy presente una intensidad dolorosa, con personajes tan distintos entre si en cada propuesta laboral. Yo elegí ser actor para hacer cine. Empecé haciéndole de extra, después llegó el turno de los personajitos chiquitos y luego, pequeños bolos. Y ahora, me encuentro haciendo personajes que podría haber hecho a los treinta y a os cuarenta pero todo tiene un tiempo y me hace muy feliz eso. Me hace feliz entrar en una parte de mi vida donde tengo la aventura y suerte de que me sigan convocando para hacer personajes que, quizá, en la televisión, tendría que hacer de abuelo. Los tiempos de la tele son esos, y sucede con las actrices, por ejemplo. Las actrices de cincuenta años ya son abuelas, son como prejuicios.
-En ese sentido, ¿La tele es cruel?
-¡Recontra cruel! No solo acá, si no en Hollywood. Una actriz que atraviesa los cuarenta ya empiezan a mirarla de otra manera y a mutar, a aparecer las dificultades de las arrugas y de lo que se le exige a la mujer, cosa de lo que estoy en contra de esa estigmatización. Estoy en contra de que no tengan la posibilidad de seguir ejerciendo su oficio si no que tengan que mutar. Pero en mi caso estoy muy contento porque empecé una nueva parte de mi carrera a partir de la película Diablo, que ganó el Festival de Mar del Plata, que es pequeña pero se convirtió de culto. Me gustaría seguir haciendo cine, trabajando para él, lo amo, y voy a dirigir Pistolero, un filme que habla de la violencia en los años sesenta.
-¿Tenés miedo de que en un par de años no te llamen como actor y por eso querés dirigir?
-No, no, no, apuesto a que me llamen como actor pero me gusta la idea de empezar a ejercer, de atreverme a la experiencia de la dirección. Me siento con más capacidad para dirigir cine que hacerlo en una obra de teatro, que es lo que más hice. No me quiero morir sin haber tenido la experiencia de dirigir una película donde mis amigos van a estar presentes atrás de las cámaras.
Tu personaje de superhéroe en la película tiene el don de ser inmortal. -¿Qué harías si vos lo fueses?
-No me imagino en esa situación y ser inmortal sería una condena. Hay que bancarse ese estigma. No es algo que cualquier persona común pudiese soportar. Cuando uno ve El retrato de Dorian Gray y ese pacto con el diablo para ser inmortal, es una decisión. Siempre preferiría seguir siendo quien soy, mortal. El gran desafío para mi es si uno está dispuesto a desafiar la vida y enfrentarse para defender sus convicciones y después terminar los días como corresponde, mirando para atrás y diciendo Confieso que he vivido como alguna vez dijo Pablo Neruda en sus memorias. He vivido la vida, divertido, sufrido, llorado, me han intentado matar pero he sobrevivido, he luchado, tenido hijos, amado, gozado del sexo, gozado de mis afectos, de la política, el arte, de la vida.
-¿Todo lo que mencionaste sería tu balance de tus cinco décadas transitadas?
-Si, en el balance hay más cosas positivas que negativas. Me siento muy contento y muy bien predispuesto a encarar lo que, se diría, la tercera edad, una ancianidad sin decir "no hice esto, no hice aquello". Lo que me faltaría es recorrer más el mundo pero no es algo que me saque el sueño, que me desvele o a lo que quiera salir corriendo de un momento al otro. Si sucede, sucede. Y si no, no pasa nada. No voy a sentir que algo fundamental faltó en mi vida.
"Me llamaron de Brasil, pero no como galán"
Palomino se reconoce alejado de la televisión local y cercano a la extranjera. "¿Si me pesa que no me llamen para hacer tele en Argentina y si en el exterior? ¡Me llama la atención! Jean Pier Noher es otro actor que está trabajando más en Brasil, como me ha sucedido a mí. Diego Olivera, hace lo suyo en México. Eso tiene que ver con la calidad de los actores. Y en caso de Olivera o Cristian Sancho, que le sucedió lo mismo también en México, es un valor agregado lo físico. En Perú, pasa lo mismo. Pero a mí me sucede lo mismo.
No es que me llaman de Brasil porque tenga un portugués excepcional si no simplemente porque me vieron en algunas películas y diseñaron un personaje para participar en ese lugar. En Brasil no hago de un galán, son personajes con impronta de hombre latinoamericano y eso me satisface muchísimo. Como acá, en Argentina, hacer de superhéroe, nunca lo hubiese imaginado. La verdad es que no lo tenía en cuenta entre mis posibilidades", explicó el artista.
"Nafta Súper es un delincuente"
"¿Qué te llevó a aceptar hacer un personaje de superhéroe, tan asociado con la cultura americana, cuando sos un defensor del patriotismo?
¡Es todo lo contrario! Nafta Súper, mi personaje, es un delincuente. Es un Argentino, un tipo que viene a patear el tablero, que le hace chas chas a la justicia. Todos los personajes de la peli son lo contrario a fabricantes de armas, como lo es Batman. Son tipos que están al margen de la ley y eso es lo que los hace atractivos. Es una respuesta, también, a los superhéroes que vienen de allá arriba. Cuando aparecieron, lo hicieron en un contexto social muy particular que han sido siempre las guerras.
Casi todos aparecen como modelos para contrarrestar las desgracias. La historia, el cine de género y el cine, esencialmente, han sido elementos culturales para introducir o inocular la mirada del mundo.
Los medios audiovisuales son elementos para introducir cualquier tipo de forma que se quiera introducir. El culto a la violencia que tienen los estadounidenses es una forma de vida que la han exportado a todo el mundo".
Un actor que no teme manifestar ideas
El último sábado como invitado del ciclo TVR, Juan Palomino dio su visión política. "Quisiera recordarles a los argentinos que en estos 12 años hemos recuperado la historia ética de la política, que hemos recuperado la posibilidad de entender a la política como una mejor herramienta cuando habían desguasado al Estado y el mercado dejaba afuera a muchísimos argentinos.. ancianos. Norma Pla era la vanguardia de la lucha, las empresas se privatizaron... no me olvido de Néstor y la papa caliente que enfrentó la papa caliente con el 12%. Y en nuestro gremio de actores, donde siempre aparecen las conveniencias, el último año se demostró una gran victoria porque pudimos romper esa barrera de la conveniencia para manifestar algo tangible. Hasta pronto, Presidenta". (Diario Popular)Miércoles, 9 de diciembre de 2015
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