600 mamografías Así lo indicó la directora del Hospital Ángela I. de Llano, Silvia Bonassies, agregando que en el Servicio de Diagnóstico por Imágenes se realizan también ecografías mamarias, y recordando que tanto los estudios como los controles médicos son fundamentales para la detección temprana del Cáncer de Mama.
Continuando con las actividades del mes de la lucha contra la enfermedad, mañana y el jueves desde las 10 en la sala de espera de la Maternidad de dicho nosocomio se realizarán charlas informativas.
Durante todo el mes de octubre se realizan actividades de prevención y concientización sobre el Cáncer de Mama en la provincia. En este marco, desde el Ministerio de Salud Pública se insiste en la importancia de los controles recordando que la detección temprana es fundamental para el tratamiento y la cura de la enfermedad.
La directora del Hospital Ángela I. de Llano, Silvia Bonassies, se refirió al Cáncer de mama indicando que “los estudios de mamografías así como las ecografías son importantes cuando es solicitada por el médico, pero también es fundamental que todos nos realicemos los controles clínicos”.
En este marco dijo que “además de las atenciones habituales que se realizan en consultorios del Hospital, contamos con un Servicio de Diagnóstico por Imágenes donde con la indicación médica correspondiente se efectúan estudios de mamografía y ecografía mamaria. En lo que va de este año se realizaron 648 mamografías y 600 ecografías mamarias”.
Continuó detallando que “mañana y el jueves en la sala de espera de la Maternidad del Hospital se realizarán charlas donde profesionales explicarán la importancia de los controles para la detección temprana, entre otros aspectos del Cáncer de Mama”.
CÁNCER DE MAMA
Es una enfermedad causada por la multiplicación anormal de las células de la mama que forman un tumor maligno. Que afecta mayoritariamente a mujeres de entre 45 y 70 años de edad, sobre la cual se desconocen cuáles son los causantes aunque se reconocen algunos factores que aumentan el riesgo de enfermar como:
-Ser mayor de 50 años
-Antecedentes personales de cáncer de mama o de enfermedad benigna (no cancerosa) de mama.
-Antecedentes familiares de cáncer de mama.
-Tratamiento con radioterapia dirigida a la mama o el pecho.
-Tratamiento con hormonas, como estrógeno y progesterona.
-Menstruación a edad temprana.
-Edad avanzada en el momento del primer parto o nunca haber tenido hijos
Prevenir el cáncer de mama significa disminuir o eliminar la exposición de la mujer a factores de riesgo de forma tal de reducir las posibilidades de desarrollar cáncer de mama. La adherencia a estilos de vida saludable es una forma de actuar de modo preventivo: no fumar, evitar el consumo de grasas, realizar actividad física, moderar el consumo de alcohol. Las terapias de reemplazo hormonal y la exposición excesiva a la radiación ionizante (rayos x) también aumentan el riesgo de tener cáncer de mama.
Básicamente hay dos formas de detectar el cáncer de mama:
La primera es por medio de la mamografía, que consiste en realizar una radiografía de las mamas. Con este estudio es posible detectar el cáncer de mama en su fase asintomática, cuando todavía la lesión no es palpable, o es mínimamente palpable, por lo cual, es posible recurrir a mejores posibilidades de cura, con tratamientos menos agresivos que los que se realizan cuando el cáncer está más avanzado.
Cuando el cáncer provoca síntomas y alteraciones de la mama detectables al examen físico, significa que estamos en presencia de un nódulo palpable. En un estado avanzado de la enfermedad se pueden observar variables manifestaciones como retracción del pezón, cambios en la textura y el color de la piel, prurito o lesiones descamativas en el pezón.
La recomendación es que todas las mujeres de entre 50 a 70 años se realicen un estudio mamográfico cada dos años junto a un examen físico de las mamas por parte de un profesional de la salud. Por otra parte, tanto en las mujeres de entre 40 y 50 años como en las mayores de 70 la decisión de hacer o no una mamografía debe ser personalizada. La mujer debe hablarlo con su ginecólogo/a o con su médico/a de cabecera, y valorar los pros y los contras de hacer el estudio mamográfico.
Por otro lado, hay otros métodos diagnósticos por imágenes, como la ecografía, la cual se usa en forma complementaria a la mamografía y la resonancia magnética que se emplea fundamentalmente en mujeres con fuertes antecedentes familiares y mutaciones genéticas conocidas detectadas o altamente sospechadas y en situaciones puntuales cuando exista indicación (por ejemplo: algunas mujeres con mamas extremadamente densas o que tengan prótesis mamarias).Martes, 20 de octubre de 2015
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