¿Qué es el metaverso? ¿Qué es el metaverso?, es una pregunta que ronda actualmente en la cabeza de muchos. Muchos dirán que se trata de una película de Spider-Man, como bromeó Mark Zuckerberg en un evento. Hablamos, sin embargo, de un espacio que deja de ser ciencia ficción para convertirse en realidad. Te contamos qué es y en qué consiste, a continuación.
El impacto del mundo digital en la vida cotidiana es indudable: desde el teletrabajo hasta el ciberterrorismo, nuestro mundo cada vez está más conectado.
Ahora, un nuevo concepto irrumpe en la sociedad como un nuevo paso en la experiencia del mundo digital, el metaverso. Hasta ahora, los medios habituales para acceder a los contenidos digitales eran el ordenador y el teléfono.
En el metaverso, el punto de acceso serán las realidades extendidas que incluyen la Realidad Virtual (VR), la Realidad Aumentada (AR) y la Realidad Mixta.
¿Qué es el metaverso? El metaverso es una red de entornos virtuales que siempre se encuentran activos a los que las personas acceden a través de dispositivos especiales como gafas de realidad virtual o aumentada para interactuar social y económicamente como avatares.
No necesariamente hay que tener uno de esos dispositivos para acceder, puede ser desde un móvil, pero la experiencia total reúne todas las sensaciones generadas por estos.
Metaverso es un acrónimo de meta, que significa trascendente, y verso, del universo. El novelista de ciencia ficción Neal Stephenson acuñó el término en su novela de 1992 Snow Crash para describir el mundo virtual en el que el protagonista, socializa y vence a los enemigos del mundo real a través de su avatar.
Esta palabra en sí no hace referencia a un tipo específico de tecnología, sino a un cambio en la forma en la que los humanos interactuamos con ella. Es como una segunda realidad digital en la que podremos interactuar con nuestros amigos e incluso tener un trabajo en el espacio digital.
Hay tres aspectos clave del metaverso: presencia, interoperabilidad y estandarización.
La presencia se refiere a la sensación de estar realmente en un espacio virtual, con otros; la interoperabilidad significa poder viajar sin problemas entre espacios virtuales, como ocurre en Ready Player One, por ejemplo.
La estandarización, por otro lado, es lo que permite la interoperabilidad de plataformas y servicios en todo el metaverso. Organizaciones internacionales como Open Metaverse Interoperability Group definen estos estándares.
Características del metaverso El metaverso reúne una serie de características específicas:
Son espacios interactivos: un usuario del metaverso podrán interactuar con el resto, así como con su entorno virtual. Estos, al igual que ocurre en la realidad, serán los dueños de su propio camino, siendo partícipes de los cambios que ocurren a su alrededor.
Son entornos corpóreos: estos espacios virtuales se caracterizan por estar sujetos por unas leyes de la física y la existencia de escasez de recursos como sucede en el mundo tangible.
Es persistente y autónomo: esto, en pocas palabras significa que pese a que no estemos usando el metaverso, este sigue funcionando. Es un entorno vivo e independientemente de si estamos conectados o no, seguirá estándolo.
Está descentralizado: el metaverso no es propiedad de una empresa o de una sola plataforma, sino de todos sus usuarios. La tecnología Blockchain además, garantiza que todas las transacciones dentro de un mundo virtual sean públicas, fáciles de rastrear y seguras.
Sin límites: se eliminan todo tipo de barreras, físicas o de cualquier tipo. Es un espacio infinito sin límite de acceso, usuarios o posibilidades.
Economías virtuales: los usuarios pueden participar en economías virtuales descentralizadas impulsadas por criptomonedas. Esto incluye mercados donde los usuarios pueden comprar, vender e intercambiar artículos para sus avatares, NFT, activos digitales...
Y es que como todo mundo "real", es necesaria una moneda. En este caso es la criptomoneda que acepte ese metaverso.
¿Qué vamos a poder hacer en el metaverso? Es probable que si consigue tener éxito la implantación del metaverso en nuestras vidas, este será un sucesor natural de lo que hoy conocemos como Internet.
Actualmente y de momento hay delineadas una serie de actividades que ya se conoce que podremos realizar en estos espacios. Por ejemplo, acudir de forma virtual a conciertos, comprar y probarte ropa, generar espacios de trabajo, llevar a cabo reuniones laborales...
En el caso de Meta, de Facebook, se basan sobre todo en el entretenimiento como primer objetivo. Hablan desde realizar partidas de ajedrez con realidad aumentada, hasta grandes batallas.
También encontramos la posibilidad de realizar rutinas de gimnasio desde casa. Por ejemplo, algunas compañías proponen un mundo virtual donde hacemos boxeo con el videojuego mientras simulamos estar dentro de un ring real y peleamos de forma real con un oponente.
En el campo del aprendizaje se habla de practicar operaciones, aprender a tocar el piano o cambiar una rueda, como si de la vida misma se tratase.
Proyectos de metaverso que ya están en marcha Todos quieren construir el metaverso, y nadie quiere perder la oportunidad de ser parte de él. Y si bien la primera imagen que asociamos a este tema es la de Meta y Mark Zuckerberg, existen más entusiastas que también van ganando espacio.
Tenemos a Microsoft, que en 2021 estrenó Microsoft Mesh, un software de realidad mixta que permite conectarse de manera virtual. El mundo digital de Microsoft va de la mano con los productos de su compañía, por lo que está enfocado en el espacio laboral.
Epic Games, por otro lado, usarán Fortnite como el principal camino a tomar en este aspecto. La otra perspectiva tiene un enfoque de colaboración, pues buscará capitalizar sus herramientas de creación de contenido, como Unreal Engine para gráficos en 3D, lo que permitirá que todas las empresas tengan presencia en tercera dimensión en tiempo real.
Si nos olvidamos de las grandes empresas, hay algunos metaversos independientes, por así decirlo, que están ganando fuerza:
Decentraland: es un mundo virtual en 3D descentralizado propiedad de los usuarios. Los usuarios desarrollan y poseen terrenos, obras de arte y NFT. Este le da a su comunidad el poder de participar en la gobernanza del proyecto. La criptomoneda nativa es el MANA, y todos los activos del juego están en la blockchain Ethereum.
Sansar: es una plataforma de realidad virtual desarrollada por los mismos creadores de Second Life. Permite la creación de espacios en 3D, donde los usuarios pueden interactuar, jugar, ver videos y tener conversaciones en realidad virtual.
Sensorium Galaxy: es un entorno virtual donde se realizan conciertos de realidad virtual de artistas de música electrónica, que se encuentra en una beta cerrada.
¿Cuáles son sus riesgos? Ahora bien, no todo es tan positivo como parece. Detrás de grandes proyectos como este siempre hay una parte negativa que también hay que contar. No todo son ventajas y no es un mundo ideal sin problemas.
La base de todo esto es que es necesario un gran desarrollo ya no solo a nivel de software, si no de hardware. Cada uno de nosotros tendremos que disponer de un equipo de dispositivos capaces de ayudar a sumergirnos en este metaverso y no es algo económico y al alcance de todos.
Otro riesgo es que implicaría meternos de lleno en habitaciones desde las que podríamos hacer todo, con todos los riesgos y problemas que supondría no salir nunca de casa a nivel de salud: vida sedentaria con todos los problemas que acarrea e incluso problemas sociales o dependencia de personas que no supiesen controlar esta vida virtual.
Encontramos grandes retos. ¿Hasta qué punto y a partir de qué edad será aconsejable? ¿Cómo se tratará la delincuencia y abusos que se registren dentro de esos entornos? ¿Estará todo permitido?
Sea como fuere, si el metaverso se convierte finalmente en el sucesor de la internet, quién lo construye, y cómo, debe ser extremadamente cauto, ya que supondrá grandes cambios en la economía y la sociedad en su conjunto.
Está claro que la idea del metaverso aún se encuentra en una etapa de desarrollo muy temprana. El creciente entusiasmo de las empresas no oculta el hecho de que todavía faltan varios años para comenzar a ver productos que tengan una implementación concreta para una vida virtual.
Y también es una realidad que para el común de las personas el término y el concepto que representa aún les resulta extraño y confuso, y no está en línea con sus preocupaciones cotidianas.
Toca, por el momento, esperar y ver si finalmente esto acaba en realidad o sigue manteniéndose en pura ficción.Miércoles, 9 de marzo de 2022
|