Alivio en el gobierno 
Esa sensación trasuntó el almuerzo que compartieron en Olivos Marcos Peña y Elisa Carrió, que por segundo día consecutivo se reunió con funcionarios pero sin encontrarse con Macri.
Las medidas adoptadas por Hacienda y el Banco Central que lograron contener al dólar, que ayer bajó 72 centavos y se ubicó en los $22,28, trajeron alivio en el gobierno: esa sensación trasuntó el almuerzo que compartieron en Olivos el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y Elisa Carrió que por segundo día consecutivo se reunió con funcionarios del Ejecutivo pero sin encontrarse con Mauricio Macri.
En Casa Rosada salieron a desmentir que existan rispideces entre los cofundadores de Cambiemos motivados por un presunto enojo del presidente con la líder de la CC y el radical Alfredo Cornejo por haber puesto en el tapete el tema tarifas obligando una posterior embestida de la oposición en el Congreso. Incluso destacaron cerca de la diputada que cuando ayer arribó a la Residencia el jefe de estado despegaba en su helicóptero para otra actividad, según se supo, un mano a mano de los que suele tener con emprendedores.
Durante la comida de ayer en Olivos fue la propia Carrió quien celebró que ‘nos vamos acostumbrando que en el bloque oficialista del Congreso haya voces que no coincidan con lo que dice la Casa Rosada, como ocurre en Estados Unidos’, desde donde había arribado el último miércoles luego de visitar organismos como la OEA y al embajador argentino Fernando Oris de Roa.
Luego de la corrida cambiaria del jueves que había llevado el billete verde a superar los $23, Carrió apareció por la tarde por Casa Rosada para visitar al secretario de Fortalecimiento Institucional, Fernando Sánchez, en un gesto de respaldo al oficialismo.
Había cruzado desde el Palacio de Hacienda donde había ‘hecho las pases’ con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien le explicó los alcances de la suba en las tarifas y el posterior plan de ‘aplanamiento’ pedido por los radicales. La diputada chaqueña quedó conforme con las explicaciones que, formalmente, las había elevado mediante un pedido de informes en el parlamento.
Ayer finalmente almorzó en la oficina de Jefatura en Olivos con Peña, el vicejefe Mario Quintana y el propio Sánchez. Degustaron bifes y milanesas -’Lilita’ optó por este plato- con ensalada en una prolongada sobremesa que extendió el ágape a casi 2 horas de duración.
Según se pudo saber, fue una de las reuniones que el grupo lleva a cabo ‘cada mes y medio’ pero en la que lógicamente se habló sobre la suba del dólar, tarifas y el proyecto opositor para frenar las subas en los servicios en Diputados.
Y también Carrió le preguntó a Peña en qué decantará la anunciada salida del titular de la Cámara baja, Emilio Monzó; por ahora suenan radicales como Mario Negri para su reemplazo.
‘Hubo una distensión en el mercado con las medidas anunciadas. Incluso bien temprano habían abierto mejor los mercados internacionales. Y quedó claro que el Central está a cargo de la política monetaria. También durante la charla se coló la discusión sobre la política tarifaria, estamos llegando a la normalización y achicando la brecha con lo que pagaban en el interior y se coincidió en que es muy grande la cobertura en el país de tarifa social’, contó una fuente consultada que tuvo acceso al encuentro.
Se valoró el pedido de la oposición para una sesión especial en Diputados el próximo miércoles que incluya el proyecto de Mercado de Capitales, que el Ejecutivo quiere sancionar para tranquilizar a los mercados, más allá de las críticas al texto que propone frenar los aumentos tarifarios.
‘Ese dictamen es irracional, no contempla el cálculo fiscal de lo que perderían las arcas públicas. Vamos a discutirlo pero a tratar de que no prospere’, amplió la fuente oficial.
Durante el encuentro Carrió no esquivó la decisión de Macri de vetar una iniciativa inconveniente para las arcas públicas. La jefa de la CC dijo que el veto presidencial ‘no es un capricho sino una excepcionalidad’.
Por otra parte, no quedó claro qué obras se van a suspender luego que ayer bien temprano el titular de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunciara la reducción en medio punto porcentual del objetivo de déficit fiscal previsto para 2018, es decir, que pase del 3,2% al 2,7% del PBI en el resultado primario, lo que implica un recorte del desequilibrio en unos 3.200 millones de dólares que muchos especulan llegaría desde una poda a la obra pública.
En el cónclave de Olivos no se habló específicamente de ello. ‘Quizás algunas obras se compensen vía las PPP (Participación Pública y Privada)’, concluyó la fuente consultada.
En el ministerio del Interior y Obras Públicas aclararon ayer ante la consulta de este medio que el recorte ‘no afecta’ al plan impulsado por la cartera conducida por Rogelio Frigerio. En este sentido, se indicó que la poda no involucra a las obras en las provincias.
‘Seguimos con el mismo presupuesto en cloacas, vivienda, urbanización y agua potable’, consignaron y detallaron que la ejecución del presupuesto en el primer cuatrimestre ya alcanzó al 35% de los recursos. ‘Tenemos 3200 obras en ejecución. Todo sigue en marcha y está garantizada su continuidad’, concluyeron.
En Transporte, el ministerio con mayor cantidad de presupuesto en infraestructura, sólo distribuyeron declaraciones del ministerio Guillermo Dietrich. ‘No va a frenarse ninguna obra de las que estamos haciendo en el país, como rutas, puertos o aeropuertos o trenes. Frente a obras que no han comenzado aún iremos evaluando el comienzo de las mismas a partir de la restricción presupuestaria’, declaró.
Sí se conoció ayer que la Secretaría General desistió de la compra del avión presidencial que reemplazaría al subastado Tango 01.
En esa dependencia hace un mes habían deslizado que habían conseguido un oferente de una aeronave por 40 millones de dólares -las candidatas anteriores costaban los 60 millones- pero finalmente el ajuste en el gasto público truncó la operación.
A contramano de lo recomendado por Seguridad y Casa Militar, el jefe de estado por ahora seguirá viajando en vuelos de línea o de alquiler. Estos últimos fueron cuestionados por la oposición -y también por funcionarios- por los altos costos que demandan. Habrá que esperar en que termina la novela del avión presidencial que comenzó hace 2 años.Sábado, 5 de mayo de 2018
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