Curuzú Cuatiá honró a San Cayetano Una multitud de feligreses participó de la procesión y de la posterior misa en honor a San Cayetano. La misma fue presidida por el Obispo Adolfo Canecín y concelebrado por el Padre Adis y los diáconos Reggi y Toledo.
La procesión con la cruz y la imágen de San Cayetano arrancó a las 17.30 saliendo de la Iglesia Parroquial, pasando por Lidueña, Soldado Meza, Rucci, Serradori y regreso por Lidueña. La procesión, que según algunos testigos, tuvo más participantes éste año que en los anteriores, estuvo compuesta por varias columnas distribuidas en casi dos cuadras.
Con toda la liturgia que se acostumbra en éstas circunstancias, Canecín caminó junto a los feligreses, quienes a ritmo de cánticos y oraciones se encolumnaban detrás de la Cruz y de la imágen del santo patrono del pan y del trabajo.
Una vez que llegó a la Parroquia, otra multitud de personas ya esperaban en el patio de la misma y ahí nomás arrancó la misa presidida por el propio Adolfo Canecin. Justamente en su homilía agradeció la atención recibida en Curuzú en todos éstos días y se mostró como un Obispo en salida, que desde hace un año que está al frente de la Diócesis de Goya y no para de viajar, estar presente y compartir con los feligreses de todo el territorio de la Diócesis.
Hasta ahora viene visitando todas las sedes parroquia, pero anunció que para el año que viene tiene pensado visitar las capillas, todas las capillas de la Diócesis. En la celebración leyó la carta que el Papa Francisco envió a Monseñor Arancedo, titular de la Conferencia Episcopal y luego mencionó que desde la Iglesia tienen que responder con el evangelio al clamor del pueblo cristiano, habló de la dignidad del pan conseguido por el trabajo digno y celebró que la semana que viene se va a abrir una Fazenda de la Esperanza en Santa Lucía, que es también parte de la Diócesis.
Mencionó la importancia de la eucaristía y reveló sobre la falta de sacerdotes en la Diócesis, pidió que la gente cuide a sus sacerdotes pero remarcó que ese cuidado no lo aburguese sino que lo ayude a ser más misionero y más en salida.
Canecin, mientras peregrinaba en procesión llegó a notar la gran cantidad de basura desparramada en el recorrido y lo dijo en medio de la homilía, recordó: "en la procesión veía y observaba que hay algunas características comunes a la tierra de donde yo vengo, la basura en las calles, basura a la vista,demasiado a la vista, habla de una cultura, de un modo de ser, todo buen cristiano tiene que ser buen ciudadano", manifestó.
Tras la misa y la eucaristía se realizó un festival musical más el sorteo del bono contribución.
Domingo, 7 de agosto de 2016
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