Última imagen de Messi El rosarino desperdició el disparo que vino inmediatamente después del remate que atajó Sergio Romero. La Pulga perdió la cuarta final que disputó con la Selección Argentina y anunció su renuncia al conjunto nacional.
La gloria, con la camiseta argentina, lo esquivó siempre. Un fantasma que lo persigue, no lo deja dormir en paz y finalmente lo dobló, le quitó las ganas y el aliento: Lionel Messi le dijó adiós a la Selección tras perder la final de la Copa América Centenario.
Esta vez, a diferencia de los otros tres partidos decisivos que disputó con el combinado nacional, el dolor le pesó más: la Pulga falló el primer penal de la serie, el que vino después del fallo de Arturo Vidal, el que pudo cambiar la serie. Enseguida se consumó la derrota. Y el crack no la pudo digerir.
Messi, como hizo en las últimas definiciones de la Selección, empezó pateando. Tanto contra Holanda como ante Chile en la anterior Copa América, el 10 del Barcelona tomó el primer disparo. Las anteriores ocasiones, convirtió; esta noche, en Nueva York, en la definición contra Chile de la Copa América Centenario, no: la pelota se fue por arriba del travesaño.
Desde su debut en la Selección argentina, en 2005, Messi disputó cuatro finales. La primera fue en la Copa América de Venezuela, en 2007.
En aquella ocasión, Brasil apabulló a los entonces comandados por Alfio Basile por 3-0. Tuvo que esperar siete años para volver a alcanzar un encuentro decisivo. La segunda chance ocurrió en el Maracaná: Alemania ganó 1-0 y el capitán tuvo una jugada donde la pelota se fue por al lado del palo.
El año pasado, en Santiago de Chile, tuvo la tercera, que no fue la vencida: Chile se quedó con la Copa América por penales. Y ahora, en Nueva York, volvió a caer a través de la definición desde los doce pasos. No brilló. No tuvo su mejor partido. Pero a diferencia de otras finales, se comprometió totalmente con el juego: encaró, buscó asociaciones, pateó al arco, causó temblores cada vez que arrancaba con la cancha de frente. Pero no se consagró con el gol. De hecho, no convirtió en ninguna de las finales que disputó con el combinado nacional.
Lágrimas, desazón, tristeza indomable. El gesto del final, la imagen del adiós. Queda por delante el Mundial de Rusia, en 2018. Messi decidirá buscar revancha. O no.Lunes, 27 de junio de 2016
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