Septiembre: Un viaje histórico a Cuba y Estados Unidos 
Septiembre fue uno de los meses más intensos para el Papa, sobre todo por su importante viaje a Cuba y Estados Unidos. Pero también tuvo tiempo para hacer una de las suyas: como cuando salió del Vaticano para arreglar sus gafas.
Francisco visitó personalmente esta óptica en el centro de Roma. En pocos segundos decenas de personas se acercaron para verle de cerca.
Eran muchos, pero eran pocos comparado con la multitud que esperaba al Papa por las calles de La Habana. Nada más aterrizar, habló sobre la nueva etapa en sus relaciones con EE.UU.
FRANCISCO
"Animo a los responsables políticos a continuar avanzando por este camino y a desarrollar todas sus potencialidades, como prueba del alto servicio que están llamados a prestar a favor de la paz”.
Francisco celebró una misa en la famosa plaza de la Revolución de La Habana, bajo la efigie del Che Guevara. Invitó a servir a las personas y no a servir las ideologías.
FRANCISCO
"Hay un «servicio» que sirve; pero debemos cuidarnos del otro servicio, de la tentación del «servicio» que «se» sirve. Hay una forma de ejercer el servicio que tiene como interés el beneficiar a los «míos», en nombre de lo «nuestro»”.
El Papa también se reunió con jóvenes cubanos, donde tuvo un discurso lleno de esperanza en el futuro, que incluyó este desafío.
FRANCISCO
"Ábrete, ábrete y sueña. Sueña que el mundo con vos puede ser distinto. Sueña que si pones lo mejor de vos vas a ayudar a que este mundo sea distinto. No se olviden”.
También visitó a Fidel Castro, que llegó al poder en Cuba pocos meses después de que el Papa se hiciera novicio de los jesuitas.
El encuentro duró 30 minutos y tocaron muchos temas. Fue una visita cordial, que los dos habían deseado, aunque durante parte de la reunión, el rostro del Papa parecía serio.
Desde Cuba Francisco viajó a Estados Unidos. Miren cómo lo recibieron cuando aterrizó en Washington. Allí les esperaba también un coche marca Fiat 500 que capturó la atención del país.
En la Casa Blanca, el Papa dijo que había viajado para "celebrar y apoyar a la institución del matrimonio y de la familia en este momento crítico de la historia”. Y recordó que los católicos americanos trabajan para construir una sociedad más justa.
FRANCISCO
"Como a muchas otras personas de buena voluntad, les preocupa también que los esfuerzos por construir una sociedad justa y sabiamente ordenada respeten sus más profundas inquietudes y su derecho a la libertad religiosa”.
El Papa cumplió las expectativas que suscitó su discurso ante el Congreso. Abordó temas como la pena de muerte o los refugiados. Pero esta frase es la que levantó el mayor aplauso.
FRANCISCO
"Hay que evitar una tentación muy común: descartar todo lo que moleste. Recordemos la regla de oro: "Hagan ustedes a los demás lo que les gustaría que los demás hicieran con ustedes”.
También intervino durante la asamblea general de la ONU. Allí lanzó una firme defensa del medioambiente, que incluyó el respeto a la vida.
FRANCISCO
"La defensa del ambiente y la lucha contra la exclusión exigen el reconocimiento de una ley moral inscrita en la propia naturaleza humana, que comprende la distinción natural entre hombre y mujer, y el absoluto respeto de la vida en todas sus etapas y dimensiones”.
Uno de los momentos más emocionantes del viaje fue su visita a la Zona Cero de Nueva York. En aquel lugar icono del dolor y el sufrimiento, pronunció un discurso esperanzador.
FRANCISCO
"En el momento de mayor dolor, sufrimiento, ustedes fueron testigos de los mayores actos de entrega y ayuda. Manos tendidas, vidas entregadas. Este lugar de muerte se transforma también en un lugar de vida, de vidas salvadas, un canto que nos lleva a afirmar que la vida siempre está destinada a triunfar sobre los profetas de la destrucción”.
Francisco viajó a Filadelfia para clausurar el Encuentro Mundial de las Familias. Allí dejó de lado el discurso que tenía preparado y habló con entusiasmo de cómo las familias sólidas construyen sociedades fuertes.
FRANCISCO
"Dios siempre golpea las puertas de los corazones. Le gusta hacerlo. Le sale de adentro. ¿Pero saben que es lo que más le gusta? Golpear las puertas de las familias y encontrar a las familias unidas, que se quieren, que hacen creer a sus hijos, los educan y los llevan adelante”.
Durante su último encuentro con los obispos del país, relató que se acababa de reunir con víctimas de abuso sexual.
FRANCISCO
"Continúa abrumándome la vergüenza de que personas que tenían a su cargo el tierno cuidado de esos pequeños los violaran y les causaran graves daños. Lo lamento profundamente. Dios llora”.
Una de sus últimas visitas fue a esta prisión de Filadelfia. Allí lamentó que haya sistemas penitenciarios que no ayuden a los presos a rehabilitarse.
FRANCISCO
"Dios quiere que volvamos a los caminos, a la vida, sintiendo que tenemos una misión; que este tiempo de reclusión no ha sido nunca un sinónimo de expulsión”.
Ese mismo día tomó el avión de American Airlines rumbo a casa, después de una de las semanas más importantes e intensas de su pontificado.Martes, 29 de diciembre de 2015
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