Boudou pasea por China Amado Boudou se escapó de la derrota de Daniel Scioli y pasó la semana de paseo por China junto a su novia, la diputada mexicana Mónica García de la Fuente. El motivo oficial de su viaje fue la firma de acuerdos protocolares con la Asamblea popular de China en Beijing, pero se hizo tiempo para viajar a Shangai, la capital financiera del gigante asiático.
La compañía de su novia tomó desprevenidos a los diplomáticos mexicanos, quienes no sabían si se trataba de una misión de su país o sólo de un viaje romántico. No sería el último viaje juntos: para no mostrase en la asunción de Mauricio Macri, Boudou viajará a la cumbre de cambio climático en París.
García de la Fuente es diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) por el estado mexicano de Aguascalientes y, antes de recalar en la política, fue abogada externa de empresas en telecomunicaciones y radiodifusión.
Escobar pertenece al polémico Partido Verde de México (PVEM), una suerte de partido muletto del PRI que insólitamente apoya el fracking y otras prácticas anti ambientales, lo que provoca el rechazo de sus pares del resto de Latinoamérica.
Como pago por su apoyo en las pasadas elecciones, el presidente priista Enrique Peña Nieto, le dio a su líder, Arturo Escobar, una subsecretaría de Estado, pero la semana pasada la propia Procuración de la República de México pidió directamente su detención, por la enorme cantidad de delitos electorales de los que se le acusa.
Esto generó un escándalo mayúsculo en la política mexicana y Escobar tuvo que renunciar al cargo.
La diputada Mónica de la Fuente deberá ahora afrontar además de los problemas con la ley de su partido en México, los que sufre su novio en la Argentina.
Boudou la conoció en uno de sus tantos intercambios parlamentarios con México, pero la relación podría complicarse tras el recambio presidencial: el fiscal Carlos Rívolo pidió que se le prohíba la salida del país por una causa sobre dádivas. Resta saber si el juez Norberto Oyarbide concederá el pedido y de ser García de la Fuente deberá viajar seguido a Argentina para verlo.
Claro que no será el único frente judicial. El juez Ariel Lijo podría enviarlo a juicio oral y público por la compra de la ex Ciccone Calocgráfica, la causa por la que está procesado y por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública.
Esa investigación embarró su paso por la vicepresidencia y se convirtió en el caso de corrupción insignia del segundo mandato de Cristina Kirchner.
Por si fuera poco, Boudou arrastra otro procesamiento por irregularidades en la compra de un auto particular. La oposición exigió destituirlo en julio de 2013, Miguel Pichetto estuvo tentado de darle lugar pero un llamado de Cristina Kirchner obligó a ratificarlo.
Quienes pudieron hablar con él estos años sólo encontraron un hombre golpeado. Estaba esperanzado de no ir a juicio oral si triunfaban Daniel Sciol y Sergio Massa, con quien trabajó en Anses.
Seguía responsabilizando a Florencio Randazzo de filtrar información en su contra, pero no imaginaba un triunfo de Mauricio Macri, con quien no tiene otro lazo en común que los ataques mediáticos. Difícil que pueda pedirle un favor, en esta dura etapa que se le viene.Lunes, 30 de noviembre de 2015
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