UNNE: Progresivo avance de urbanizaciones sobre lagunas periurbanas de Corrientes Investigaciones demuestran que es progresivo el avance de urbanizaciones sobre el sistema de lagunas periurbanas conocidas como “Lomadas Arenosas” en la provincia de Corrientes. El 10% del crecimiento de la ciudad Capital fue sobre estas lagunas.
La región denominada “Lomadas Arenosas” corresponde al abanico aluvial formado por el sistema del río Paraná, que cubre el noroeste y parte del suroeste de la provincia de Corrientes, así como parte del Paraguay. Presenta una distancia lineal de alrededor de 260 Km de longitud en sentido N-S y 500 km de ancho.
Esta región es una llanura ondulada cuya altura media se puede calcular, aproximadamente, en 60 m sobre el nivel del mar y en 15 a 20 m sobre el nivel del río Paraná. Es decir que son zonas altas pese a estar conformadas por lagunas y bañados.
En la provincia existen más de 30 mil lagunas sobre las lomadas, las cuales dependen de las lluvias locales para la permanencia y renovación de sus aguas. Pero la cualidad de ser zonas altas, llevaron a que las lagunas del sistema “Lomadas Arenosas” sean foco de interés para ocupaciones urbanas y atractivo inmobiliario.
Si bien desde la Universidad Nacional del Nordeste hace tiempo se vienen realizando estudios sobre este sistema de lagunas, frente al progresivo avance de urbanizaciones sobre el área de estas lagunas un proyecto a investigación buscó conocer cuál es el impacto que ha generado el crecimiento espacial urbano sobre la existencia y permanencia de lagunas periurbanas.
La investigación se centró en la zona cercana a la Capital de la provincia, pero se considera que la realidad allí encontrada puede ser trasladada a otras áreas de la región de Lomadas Arenosas de la provincia de Corrientes que sufren el mismo proceso de ocupación de lagunas.
En la zona de la ciudad de Corrientes y alrededores se ubica parte de lo que se conoce como “Lomada Norte”, que integran las Lomadas Arenosas”, y que constituye un espacio de crecimiento urbano de excelencia, generando una "fuente de atracción" en la especulación inmobiliaria que se manifiesta en la gran demanda por la ocupación de este espacio. La Lomada Norte, que incluye al Departamento Capital y otras localidades, presenta un área de 5 Km de ancho por 80 Km de largo, y aproximadamente 925 lagunas, que en períodos secos se pueden llegar a evaporar por completo el agua de sus cubetas, dejando espacios que luego son ocupados por la población en forma espontánea o debido a causa de una débil o imprudente planificación por parte del mercado inmobiliario. Para analizar el impacto de la acción humana sobre este sistema de lagunas periurbanas, mediante Sistemas de Información Geográfica se analizaron y compararon imágenes satelitales para detectar cambios recientes, como así también fotografías aéreas de la ciudad de Corrientes tomadas en el año 1950, a fin de detectar los cambios en la cobertura del suelo y los distintos impactos.
“Los resultados obtenidos demostraron que en la Lomada Norte desde el año 1950 hasta la actualidad han desaparecido o se han modificado 51 lagunas exclusivamente por el crecimiento espacial de la ciudad. Otras han sufrido modificaciones por otras acciones humanas” explica Félix Contreras, profesor del Departamento de Agrimensura de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE y Becario Doctoral del CECOAL (CONICET – UNNE).
En 1950, la ciudad de Corrientes abarcaba una superficie aproximada de 17 Km2 y desde entonces hasta el año 2012 el crecimiento fue de 33 Km2, lo que significa que el crecimiento espacial en las últimas seis décadas duplicó al existente en el año 1950.
Como consecuencia de ello, se ha modificado el paisaje y el uso del suelo. La extensión urbana ha contribuido a la desaparición de 33 lagunas de la Lomada Norte, equivalentes a 3,4 Km2. Eso significa que el 10% de los espacios ocupados por el crecimiento espacial en la capital provincial son lagunas desaparecidas, según se desprende de la investigación.
Contreras detalló que el Departamento de Capital posee 114 lagunas, que sumadas las 33 que han desaparecido entre 1950 – 2012, representan un total de 147 lagunas. “De esas 147 lagunas, el 35% ha sufrido algún tipo de impacto y el 23% ha desaparecido como resultado del crecimiento espacial de la ciudad de Corrientes”.
“La ocupación de nuevos espacios genera un impacto en la naturaleza, por lo cual es fundamental contar con políticas de ordenamiento territorial que regulen y controlen los frentes de avance de la ciudad”, señaló el investigador.
Consideró que debe tomar fuerza la necesidad de proteger las lagunas de la Lomadas Arenosas, pues además del valor ambiental de estas lagunas, se trata de paisajes muy vulnerables que pueden dejar expuestas a la población ante determinados riesgos, como inundaciones.
A partir de la observación de imágenes satelitales actuales se advierte que el crecimiento espacial de la ciudad se concentra sobre dos rutas: la primera con dirección noreste (RN 12), mientras que la segunda con dirección este (RP 5). “Claramente se puede apreciar que el principal frente de crecimiento espacial de la ciudad se realiza a través de la segunda ruta mencionada, (Ruta Nº5) como consecuencia de su trazado sobre la lomada arenosa, con su topografía más elevada” explicó.
Este avance urbano se concreta en gran parte por medio de barrios planificados con población de clase media a través de espacios que presentan, relativamente, buenas condiciones para el asentamiento. Es por ello, que los espacios sobre la Lomada Norte, son espacios periurbanos de elevados costos y en la actualidad hasta se ofrecen como clubes de campo.
Para los especialistas, estas zonas deberían ser consideradas como hábitats preferenciales para la recreación de la sociedad, protección de la naturaleza, control climático y por sobre todo, destinadas a brindar seguridad a la población frente a las amenazas naturales, tales como inundaciones y anegamientos.
Se insiste en que las funciones y servicios ambientales de estos cuerpos de agua deberían ser inmediatamente más relevantes que sus significados estéticos, pues se destacan por servir como áreas de infiltración profunda y almacenamiento de las aguas de lluvia, y consecuentemente, de control del escurrimiento superficial y de las inundaciones.
"Evitemos que las lagunas tengan que adoptar forma de animales para llamarnos la atención, empecemos a cuidarlas" sostiene Contreras en relación a la importancia que se otorga al cuidado de muchos animales, cuidado que no siempre se brinda a las lagunas que son un reservorio de biodiversidad.
Comentó que desde la Universidad, y dentro de distintas becas de investigación de la Secretaría General de Ciencia y Técnica, se vienen venimos realizando diversas investigaciones en pos de lograr comprender las dinámicas naturales de las lagunas y colaborar con un ordenamiento territorial que permita reducir al mínimo los impactos del hombre e incluso los riesgos a los cuales se expone por el desconocimiento de lo ya mencionado.
En este marco, se han generado vínculos con la Dirección de Planificación y Obras de la Provincia de Corrientes, la cual ha utilizado la cartografía generada por la UNNE para realizar obras en beneficio de la población protegiendo este recurso.
Señaló que si bien en el CECOAL existe un grupo de trabajo a cargo de la Dra. Alicia Poi, quien ha investigado estos cuerpos de agua a lo largo de su carrera, el objetivo del equipo de investigación en formación que integra, “es sumar al estudio de las lagunas, abordándolas desde diversos enfoques incorporando el campo de lo social”.
Son ejemplos de ello la investigación de Elsie Araseli Ojeda (Prof. en Geografía), con el estudio del riesgo ambiental del asentamiento urbano sobre áreas potencialmente anegables; Lourdes Soler Puy y María Clarissa Sommaruga (estudiantes de la carrera de Arquitectura), que trabajan en la tesis final titulada "Intervención Urbana y recuperación paisajística del sistema de lagunas (Laguna Brava, Corrientes)" en la que se considera a las lagunas como elementos del paisaje a tener en cuenta mediante un turismo sustentable y por último Mariana Paola Odriozola (Lic. en Biología), quien estudia el impacto del hombre sobre estas lagunas desde una visión que ofrece la Biología.Miércoles, 25 de noviembre de 2015
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