Meteorología: trabajan en sistemas regionales para alertar eventos extremos Investigadores de la UNNE, que trabajan en estudios de fenómenos del clima, destacan esfuerzos a nivel país para el desarrollo de sistemas “regionales” de pronósticos meteorológicos y asimilación de datos para minimizar errores de los actuales pronósticos. Remarcan importancia de modelar pronósticos regionales del tiempo para la alerta temprana de eventos extremos.
Las numerosas evidencias en los últimos años de los efectos del cambio climático en la intensificación y en una mayor frecuencia de eventos extremos, hacen que resulte de importancia el desarrollo de sistemas de pronósticos y alerta temprana en el país.
La simulación de la evolución de la atmósfera se realiza a través de modelos matemáticos. Estos modelos por un lado se enfocan en la “predicción del clima” la cual es a largo plazo (a varios años) y de gran escala territorial, y por otro lado se enfocan en los “pronósticos meteorológicos del tiempo” que son de muy alta resolución para dar el pronóstico a corto plazo (hasta 5 días) en escalas más pequeñas.
Estos últimos modelos, de pronóstico, son los que permiten dar alertas tempranas y que van ganando relevancia ante la ocurrencia de fenómenos meteorológicos extremos en el actual escenario de cambio climático.
En la actualidad para la realización de los pronósticos se utilizan como condiciones iniciales principalmente datos globales realizados por centros de Estados Unidos y de Europa. Muchos países avanzaron en disponer de herramientas de asimilación de datos regionales que posibiliten un pronóstico lo más exacto posible de los fenómenos climáticos que se registran en su área territorial.
En el país, el “Grupo de Investigación en Ciencias Atmosféricas” (GICA) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE, trabaja en forma articulada con el Servicio Meteorológico Nacional, y la Universidad de Buenos Aires, en el desarrollo de “un sistema de asimilación de datos regional” que pueda ir ajustándose a las necesidades locales, algo que no siempre puede realizarse con los sistemas globales convencionales diseñados y operados en otros países.
“Debe haber condiciones iniciales muy precisas para hacer un pronóstico meteorológico preciso”. Por eso, el interés de los especialistas en pronósticos en describir con la menor incertidumbre posible las condiciones iniciales del estado de la atmósfera” explicó el doctor Manuel Pulido, director del GICA, profesor del Departamento de Física de FACENA e investigador de Conicet.
Señaló que al hablar de pronósticos no se debe pensar únicamente en si lloverá o no, o en la temperatura de mañana, sino en especial de pronosticar eventos de gran intensidad y dar alertas tempranas que son de fundamental importancia para la comunidad. Recordó que la región Sudeste de Sudamérica es una de las regiones del mundo más afectadas por fenómenos conocidos como “tormentas convectivas severas” de gran intensidad. Se trata de fenómenos meteorológicos asociados a la ocurrencia de granizo, vientos fuertes, tornados, precipitación y actividad eléctrica, que suelen causar desastres en Argentina.
“Para minimizar el impacto de estos fenómenos, y otros, se considera relevante desarrollar modelos de pronósticos que operen con la mayor precisión posible o ajustar los modelos existentes” insistió el investigador de la UNNE.
En esa línea, el Grupo de Investigación en Ciencias Atmosféricas (GICA) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE, se dedica al estudio y abordaje tanto de modelos climáticos, enfocados en hacer aportes sobre el Cambio Climático, así como modelos de pronósticos orientados a optimizar los pronósticos meteorológicos.
En la tarea de desarrollar y mejorar los modelos de pronósticos, el aporte de los investigadores del Grupo de Investigación en Ciencias Atmosféricas de la UNNE se orienta principalmente a lo que se conoce como “estimación de parámetros de los modelos utilizando asimilación de datos”.
“Los modelos de pronósticos son ecuaciones matemáticas, pero no son exactos, es común que tengan errores de modelado. Para mejorarlos se deben incorporar datos y nuestra tarea consiste en diagnosticar los errores a partir de observaciones meteorológicas, y hacer propuestas para mejorar los modelos” comentó el doctor Pulido.
Así, la estimación de parámetros basada en asimilación de datos es una manera objetiva y eficiente de ajustar diversos parámetros que aparecen en los modelos numéricos de atmósfera. La técnica se basa en optimizar el valor de los parámetros de forma tal de minimizar el error del pronóstico con respecto a un conjunto de observaciones.
La asimilación de datos, según aclaró el investigador de la UNNE, sirve tanto para modelos de pronósticos como para modelos climáticos.
Esfuerzo Local. Pulido destacó que en la propuesta de desarrollar un sistema de asimilación de datos regional, se están realizando esfuerzos en forma mancomunada entre las universidades y el Servicio Meteorológico Nacional.
“El objetivo es tener una visión más cercana y precisa de los fenómenos meteorológicos” sostuvo y destacó que entre otras acciones favorables en ese sentido se puede mencionar la instalación de nuevos radares meteorológicos en distintos puntos del país a través del programa “SINARAME”.
Señaló que en un contexto, donde día a día se están manifestando señales de los efectos del cambio climático, en particular en la intensificación de eventos extremos, y lo vulnerable que es la población ante estos eventos, se requiere por un lado mejorar la infraestructura observacional y por otro formar recursos humanos en el área de meteorología y el clima, para lo cual existen importantes iniciativas de formación de profesionales vinculados a estos nuevos objetivos trazados en materia de meteorología y clima en el país.Jueves, 19 de noviembre de 2015
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