Viajeros uruguayos visitaron Radio Guarani: "La verdadera revolución es hacer lo que uno quiere"
(Audio) Una familia de jóvenes trashumantes visitaron hoy los estudios de la AM 970 Radio Guarani y contaron detalles de su vida cotidiana, para nada rutinaria en la cual tienen en su haber varios años de recorrida por Europa y otros países.
Oriundos de Uruguay, una familia compuesta por Claudio Acevedo de Montevideo, Gabriela, de Guichón (Paysandú) y Raziel nacido en España de 8 años, se acercó hasta la radio y comentaron detalles de su vida nómade por momentos y trashumante por el otro.
Claudio Acevedo, autodefinido como "líder de la expedición", comentó que decidieron elegir ésta vida y salir al mundo hace unos 8 años "cuando nuestro hijo tenía apenas 11 meses y llevamos 8 años de vida nómade por el mundo".
Años más tarde, cuando por éstas latitudes azotaba la crisis del 2001, pegaron el gran salto y cruzaron el océano hasta llegar a Barcelona, España donde se radicaron por una buena cantidad de años, hasta nuevamente retomar su camino.
Cuando se les consultó el o los motivos que los llevó a elegir éste camino de la vida, Claudio respondió que "por muchos factores" pero hizo especial hincapié en la necesidad de "meterle ingredientes a la vida, y salir de la rutina que nos deja dormidos, el día a día".
Y añadió que "si hacés lo mismo todos los días, ya se saben los resultados. Poner ingredientes a la vida", de eso se trata.
Gabriela, por su parte, nacida en el pequeño poblado de Guichón (Paysandú) contó que siempre quiso viajar. En un baile en Montevideo, hace unos 21 años conoció a Claudio quien lo deslumbró y desde ese momento recorren la vida por el mundo, complementándose uno a otro, con su pequeño hijo Raziel, y su mascota uruguaya "Timmy", todos a bordo de un auto repleto de un bagaje cargado de sueños, de libertad, pero más que nada de haber encontrado en el camino a cientos de personas solidarias en todo el mundo.
De hecho, Claudio se mostró en un momento soprendido por ese espíritu solidario de la gente, y señaló que cuando uno es feliz, hace lo que quiere, no se frustra y no frustra a los demás, y los demás ven ésto y lo retribuyen con buena onda y solidaridad.
"Viajar te abre la cabeza y el corazón", enunció Claudio sintetizando el espíritu aventurero que cautivó a esta familia y la resguardó de la rutina que la mayoría de los mortales, por no salir de su espacio de confort prefieren verlo como meros expectadores.
Cómo ayudar, colaborar con ellos, o sencillamente encontrarlos y tener una buena charla
En este momento están parando en el Camping Municipal, muy cerca de la radio, allí están los tres, ávidos de charlar con los curuzucuateños y de compartir su experiencia de vida, y presentarles un material audiovisual que venden a quien quiera ver un resumen de sus 8 años de viaje por el mundo, en el cual se destacan muchas zonas de montaña, ya que a Claudio le gusta estar cerca del cielo, escalar, como a todo espíritu libre.
A los lectores que quieran encontrarlos, busquen en Facebook y también en El blog Por las Mías con variada información sobre su recorrida.
"Vamos a seguir viajando hasta que nos cansemos", dijo Claudio que dicho sea de paso no tienen nada que envidiarles a los gitanos. Gabriela, con un poco de humor afirmó: "somos medio gitanos", y dijeron que cuando vivieron en Barcelona, frecuentaban un barrio gitano allí, aparte de declararse fanáticos de la vida gitana y de la música flamenca.
No tienen GPS, ni brújula, ni guía, "dejamos que la casualidad nos lleve" y que la vida los soprenda. "Nos dejamos llevar por el camino y por la gente a quien les contamos nuestra historia", manifestaron estos uruguayos aventureros, que eligieron romper con los moldes, y ser revolucionarios de la vida.
Para elegir éste modo de vida, hace falta una pizca de valor, es un gran paso, y básicamente comienza, según explicó Claudio con "abandonar el miedo, y después ver que se quiere hacer y hacerlo", entendiendo ésto con hacer lo que se quiera sin perjuicio de los demás.
"Somos muy felices porque hacemos lo que queremos, tenemos un libro que se llama la revolución es hacer lo que quieres. Es un libro un poco raro, pero si hay una revolución debe ser hacer lo que uno quiere", reveló como si fuese la fórmula de la felicidad.
Y dijo que cuando una persona hace lo que quiere, deja de frustrarse y no le nace hacer daño al otro.
En tanto que Raziel, el hijo de ambos, de ocho años, se mostró conforme con los viajes, y destacó que su madre es la que le enseñó a leer y escribir, aunque al parecer, Raziel se inclina más por las matemáticas. Gabriela, al reflexionar sobre él señaló que en su momento van a respetar la voluntad del chico, si quiere seguir con ésta vida nómade o si elige establecerse, formar una familia, etc. "Lo queremos dejar libre, que él se sienta bien con lo que haga, para nosotros estará bien lo que él quiera, para nosotros estará bien eso", sostuvo Gabriela, quien en otra parte de la entrevista dijo que para viajar por el mundo, contrariamente a lo que se piensa, no hace falta tanto equipaje, "a lo largo del viaje aprendimos que no es necesario tanto, con pocas cosas te arreglás para vivír", reveló esta familia poco común, feliz, libre y revolucionaria.